Justo cuando parecía que McLaren sólo podía mejorar, cayó a nuevas profundidades ayer luego que la primera vuelta de prácticas de Fernando Alonso para el Gran Premio de España acabó en un soplo de humo y un charco de líquido de transmisión.Una nube de humo blanco envolvió al excampeón cuando su McLaren se salió de una curva y hacia la grava al arranque de la sesión matutina en el Circuito Barcelona-Catalunya.
El radio del equipo le dijo: “Para el coche, para el coche, problemas con el motor”, mientras se veía líquido saliendo de abajo del vehículo. El escape se tornó en un derrame de fluido amarillo cuando una grúa sacó el coche de Alonso de la pista.
Para entonces, Alonso era llevado al paddock en la parte trasera de un scooter, mientras saludaba humildemente a algunos de los fanáticos locales que habían acudido a darle al piloto español un necesitado ánimo.
Alonso se disculpó con sus seguidores por el fracaso y culpó a Honda, fabricante de los motores para McLaren.
“Es un problema de Honda. El motor se descompuso tras una curva”, le dijo a Sky F1 TV. “Es duro, pero más duro para McLaren, que realiza actualizaciones para tratar de ganar milisegundos aquí y allá y ni siquiera podemos correr”.
Menos de dos horas más tarde, Alonso jugó un poco de ping-pong “manteniendo el cuerpo activo” mientras los mecánicos del equipo le cambiaban el motor a su coche para la sesión vespertina, en la que fue el último de los 20 pilotos en salir a la pista. El español finalizó con el tiempo más lento de la tarde, más de tres segundos detrás del líder Lewis Hamilton.
Alonso y McLaren están teniendo una pésima campaña en el 2017. Tras algunos progresos con su motor Honda el año pasado, el equipo ha dado un enorme paso atrás, y ni Alonso ni su compañero Stoffel Vandoorne han conseguido aún un punto.
Alonso ni siquiera ha finalizado ninguna de las cuatro carreras.
