Con Venezuela como sede principal, la República Dominicana y Colombia comparten la subsede del XIII Encuentro Iberoamericano de la Sociedad Civil, una reunión bienal de organizaciones sociales de la región y que este año abordará el tema “Iberoamérica 3.0, la Juventud y el Futuro de la Sociedad Civil”, con el objetivo de fortalecer las capacidades de la población juvenil iberoamericana, a través de la exposición de buenas prácticas y lecciones aprendidas que puedan replicarse a escala regional.
En el marco de este evento internacional, los días 20 y 21 de octubre, se agota un programa de conferencias interactivas, paneles e intercambios que abordan las distintas problemáticas de la juventud en las sociedades iberoamericanas, partiendo del escenario de que hay 148 millones de jóvenes en Latinoamérica y el Caribe, de los cuales 48 millones se encuentran en situación de riesgo y de ellos 32 millones ni estudia ni trabaja.
En el acto inaugural y en las sesiones plenarias y mesas de trabajo celebradas en los tres países anfitriones se debaten cuáles deben ser entonces las políticas públicas de generación activa de empleo juvenil y qué perfil profesional necesitan las empresas actualmente, como vía para aumentar la empleabilidad y la calidad de vida de los jóvenes.
La cuarta revolución industrial
En este sentido, el director para América Latina y el Caribe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), doctor José Manuel Salazar-Xirinachs, ofreció una disertación especial sobre el estado de la juventud iberoamericana y su futuro, señalando de forma relevante los impactos sobre el mundo del trabajo que empieza a traer la llamada cuarta revolución industrial, basada en los rápidos avances tecnológicos, lo que está determinando la creación de nuevas habilidades y nuevos empleos, mientras otros enfoques formativos y ocupaciones tienden a desaparecer.