SANTO DOMINGO.- El Ministerio de Salud Pública informó que previsto invertir alrededor de USD$ 500,000 entre 2016 y 2018 en la prevención y control de la tuberculosis en los centros penitenciarios de la República Dominicana, con el propósito de reducir el impacto de esa enfermedad en los reclusos del país.
La directora del Programa Nacional de Control de la Tuberculosis del Ministerio de Salud, doctora Belkys Marcelino, informó que la inversión incluye la introducción de pruebas moleculares rápidas denominadas Xpert MTB Rif (2 horas) de alta sensibilidad diagnóstica (95%) y resultados más oportunos, además de acceso a radiografía digital, para detección más oportuna de los casos de esta enfermedad.
“La medida busca detectar los casos para garantizar la curación y lograr las metas planteadas en la estrategia Fin de la TB, en coherencia con los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS)”, explicó.
Un informe remitido al despacho de la Ministra de Salud, Altagracia Guzmán Marcelino, precisa que en la República Dominicana las personas privadas de libertad conviven en condiciones que varían desde adecuadas hasta extremadamente precarias. En el sistema confluyen dos modalidades de gestión penitenciaria: un nuevo modelo, con 17 recintos; y el modelo tradicional, que gestiona 19 centros.
Señala que la prevalencia de tuberculosis en centros penitenciarios constituye un serio problema de salud, razón por la cual el Ministerio de Salud y el Ministerio Público han establecido medidas conjuntas para la prevención y el control de la enfermedad.
El caso de Higuey
La profesional de la neumología informó que el caso de la preventiva de Higuey se aplicó prueba a un total de 42 internos sospechosos, de los cuales uno fue conformado mediante análisis clínico. Desde hoy mismo ese privado de libertad recibe tratamiento a cargo de la Dirección Provincial de Salud, en un espacio separado.
Como medida orientada a cortar la cadena de transmisión en los centros penitenciarios, asegura, se mantiene la vigilancia epidemiológica de la tuberculosis, búsqueda activa de casos sospechosos, la separación de casos positivos hasta su negativización y la evaluación de los internos de reciente ingreso a cualquiera de los espacios para privados de libertad.
“Un personal capacitado dará los servicios de atención primaria en los 39 centros penitenciarios en que se ofertan los servicios de primer nivel de atención, que incluyen las intervenciones de prevención y control de tuberculosis y coordinación con la red de servicios del Sistema Nacional de Salud”, consigna la doctora Belkys Marcelino en el informe.