Con el grito de “la lluvia no daña mi fiesta”, conocido merengue de los años ochenta que cantaba Fernando Villalona, el público de Andrés Cepeda enfrentó las gotas de agua que caían en la noche del pasado sábado. Bonita prueba de devoción que le hacían sus seguidores dominicanos a este cantautor colombiano que actuaba por quinta vez en un escenario local.
Y aunque algunos se marcharon, porque el “El mensaje”, nombre del espectáculo, estaba ya en su parte final, la mayor parte se quedó, algunos de los cuales se acercaron más al escenario, lo que hizo el concierto más íntimo.
“Vine a escucharlos a ustedes”, dijo Cepeda, quien se entregó a su audiencia, como en las anteriores oportunidades, ofreciendo un concierto de aproximadamente dos horas. El repertorio empezó con “Lo mejor que hay en mi vida”, ovacionado desde que apareció con sus grandes lentes de pasta, su pelo rizo y sus tenis sin medias, detalles que, unidos a su actitud desenfadada hicieron más íntimo el encuentro.
“Estos son los conciertos que me gusta dar a a mí. Estamos cerquita, les puedo ver las caras casi a todos. Que maravilla, gracias, ¿cómo están?”, fueron las palabras con las que empezó a hablar al público que llenó el anfiteatro Nuryn Sanlley. En su mayoría del género femenino, los presentes entonaron junto al artista las románticas letras que contienen las canciones que interpreta Cepeda.
Cuando tocó el turno a “Esto no es casual”, y como ha hecho en sus anteriores visitas, no resistió la tentación de estar más cerca de la gente, y bajó del escenario para que sus fans pudieran tocarlo y hacerse fotos junto a él. Este último detalle no falta en este tipo de conciertos, donde los que tienen los asientos más cercanos se arriman al escenario para hacerse fotos con la artista actuando de fondo.
“El Carpintero del amor”, “Sé morir”, fueron algunas de las primeras en ser interpretadas.
“Para amarte mejor” y “No tiene sentido”, las realizó con un arreglo en salsa, más movidas que las originales. Este us románticas letras y la mezcla musical de pop, bolero y latin, han hecho que este bogotano nacido hace 42 años se haya hecho con una importante legión de seguidores en República Dominicana.
El concierto estuvo dividido en dos partes y al final de la primera, hizo una sección de boleros, acompañado de sus guitarristas. “Tengo ganas”, “Se te nota”, fueron algunos de esos, para dar paso a que su corista, Victoria Castillo, se quedará con la banda en el escenario para hacer dos canciones. Un detalle bonito, es que al presentarla Cepeda mencionó que estaba de cumpleaños y el público de manera espontánea, le cantó “Celebro tu cumpleaños”.
Volvería al escenario para seguir paseando sus coreadas canciones como “El mensaje”, “Besos usados”, “Un ratito”, para decir adiós con “Me voy”. Ya al final del concierto una niña subió al escenario para entregarle una bandera colombiana, la cual besó. Andrés Cepeda se despidió del escenario pasada la medianoche con la canción “Día tras día”.
La gente con la fi rme disposición de disfrutar
Al concierto “El mensaje”, del colombiano Andrés Cepeda, la gente llegó con la disposición de pasarla bien.
Podía verse a parejas bailar o algunas personas que dedicaban canciones en llamadas por celulares. Entre la audiencia pudo verse algunas figuras del medio artístico, como el cantautor Pavel Núñez, los presentadores de televisión Irving Alberti y Luis José Germán, o la cantante colombiana Tueska, quienes estaban sentados en primera fila.