Para el próximo 2015 la entrada de productos libres de aranceles bajo el tratado de libre comercio firmado entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (DR-Cafta) no será ningún problema, debido a que se trata de un desmonte de un 3.2% y de un sacrificio fiscal para el Estado de apenas RD$200 millones a RD$300 millones, los cuales serán compensados con el incremento del consumo.
La mayor parte del desmonte ha sido aplicado en los últimos 10 años. En 2015 termina el último tramo de las canastas (grupos de productos a ser desmontados): ‘C’, ‘M’ y ‘Y’, y, en la actualidad, el 88% del arancel del DR-Cafta está liberalizado.
La información fue externada por el ministro de Industria y Comercio, José Del Castillo Saviñón, durante su participación en el encuentro LISTÍN DIARIO en la Globalización, que coordina el economista Juan Guiliani Cury para esta sección de Economía & Negocios, donde dijo que la protección efectiva para la industria se ha venido desmontando.
No obstante, precisó que para el 2016 iniciará una importante desgravación arancelaria para productos sensibles del agro, como son el arroz, ajo, entre otros que culminará en 2020 y 2025.
El ministro asistió al encuentro en compañía de Ana Carolina Franco, directora de Análisis Económico, Industrial y Comercial; Katrina Naut, directora de Comercio Exterior (Dicoex); y de Yasser Vidal, encargado de Redes Sociales, así como de Dessiré Ovalles y Evelin Peguero, del Departamento de Comunicaciones, donde destacó que este año 2014 cerró con buenas perspectivas para la economía.
Sostuvo que en parte la baja de los precios del petróleo y sus derivados, que nadie pensó que estarían en US$55 por barril, deberá incidir de manera favorable en los precios de los artículos de consumo, debido a que los combustibles representan el 40% de los costos de la producción, por el transporte y la electricidad.
Aunque ese comportamiento implica un costo fiscal por un menor ingreso al Gobierno por concepto del impuesto Ad-valorem (que se aplica sobre el valor del producto); conlleva un impacto importante hacia la baja en el subsidio al sector eléctrico.
“Para República Dominicana esa es una noticia importantísima”, recalcó el minsitro al recordar que el país es importador neto de combustibles.